2010/08/24

EVALUACIÒN DE REFORZAMIENTO


LITERATURA REALISTA


Debe responder a todas las preguntas. Luego redactar un comentario a cerca de la evaluaciòn que desarrollò.

Indique el nùmero de aciertos y desaciertos.

2010/08/22

CONTENIDOS TEMÀTICOS

III BIMESTRE

 El realismo: narrativa y poesía
 La narrativa y el teatro contemporáneo
 vanguardia
 El cuento hispano
 La descripción científica
 Literatura en Hispanoamérica
 La entrevista y el currículo
 El romanticismo – modernismo
 El “Boom” literario
 Literatura actual

“Temo ser frío, seco, egoísta, y Dios sabe bien, sin embargo, lo que
sucede en estos momentos dentro de mí.”
Gustavo Flaubert


Guía Directiva
1. Elabore el siguiente glosario terminológico:
a. Positivismo
b. Experimentación
c. Realidad
d. Objetividad

2. Utiliza el mapa mental y anota los datos más importantes del contexto en que se desarrollo el realismo.

3. A través de un cuadro comparativo establezca las características entre las siguientes tendencias:

a. Realismo
b. naturalismo
c. parnasianismo
d. simbolismo

4. Anote en cada tendencia sus representantes, señalando su nacionalidad y obra más destacada.

5. Anota en tu cuaderno el análisis del siguiente poema

Mujer y gata
La sorprendí jugando con su gata,
y contemplar causóme maravilla
la mano blanca con la blanca pata,
de la tarde a la luz que apenas brilla.

¡Como supo esconder la mojigata,
del mitón tras la negra redecilla,
la punta de marfil que juega y mata,
con acerados tintes de cuchilla!

Melindrosa a la par por su compañera
ocultaba también la garra fiera;
y al rodar (abrazadas) por la alfombra,

un sonoro reír cruzó el ambiente
del salón... y brillaron de repente
¡cuatro puntos de fósforo en la sombra!
Paul Verlaine

Siga el esquema sugerido.

El albatros
Por divertirse a veces suelen los marineros
cazar a los albatros, aves de envergadura,
que siguen, en su rumbo indolentes viajeros,
al barco que se mece sobre la amarga hondura.

Apenas son echados en la cubierta ardiente,
esos reyes del cielo, torpes y avergonzados,
sus grandes alas blancas abaten tristemente
como remos que arrastran a sus cuerpos pegados.

¡Este viajero alado, oh qué inseguro y chico!
¡Hace poco tan bello, qué débil y grotesco!
¡Uno con una pipa le ha chamuscado el pico,
imita otro su vuelo con renqueo burlesco!

El Poeta es semejante al príncipe del cielo
que puede huir las flechas y el rayo frecuentar;
entre mofas y risas exiliado en el suelo,
sus alas de gigante le impiden caminar.
Charles Baudelaire
6. De importancia para la lectura los siguientes autores:
a. Argumentos:
 Madame Bovary (Gustave Falubert)
 El papà Goriot (Honorè de Balzac)
 Moby Dick (Herman Melvilla)
 Ana Karenina (Leòn Tolstoi)

b. Lectura obligatoria
 Crimen y castigo
 La madre (Máximo Gorki)

7. Presentar a través de una galería literaria la vida y obra de los autores más representativos del realismo.

8. Realizar un análisis literario de la obra Crimen y Castigo.

9. Las actividades se desarrollarán en forma personal. La exposición se efectúa el primer día de clase.

2010/08/16

Neurociencias: Un recurso vital para la investigación

Estudian el cerebro "al desnudo"
En el biobanco de Fleni intentan develar los secretos moleculares de enfermedades neurodegenerativas.

En el siglo XIX, cuando el célebre médico, anatomista y antropólogo francés Paul Broca descubrió el centro del habla en el cerebro estudiando a pacientes afásicos, se creía que el tamaño de este órgano desconcertante estaba vinculado con la inteligencia (¡y de eso deducían que las mujeres tenían menos capacidad que los hombres!).
Cuando moría un personaje destacado, los investigadores solían disputarse su cerebro para medirlo y pesarlo. Fue así como surgió la idea de reunir "colecciones" de cerebros que permitieran caracterizarlos, compararlos y correlacionar sus características anatómicas con las observaciones clínicas, pero en esos tiempos no había manera de preservarlos.

Hoy, una red mundial de bancos de cerebros permite a los investigadores bucear en los más intrincados senderos de la mente. Aunque existen sólo ocho al sur del ecuador (uno en Nueva Zelanda, cinco en Australia y uno en Brasil), hay uno que funciona en Buenos Aires. Más precisamente, en Belgrano, en la sede de Fleni.

"En la época de Broca surgió la patología como ciencia y comenzaron a recolectarse cerebros -cuenta Gustavo Sevlever, director de docencia e investigación-. En Rusia, cuando murió Lenin [en 1924], llamaron a dos neuropatólogos alemanes muy prominentes, los Vogt, que eran marido y mujer, y empezaron a estudiar cerebros para encontrar la esencia del socialismo. Ellos cortaron el cerebro de Lenin en fetas, en lo que fue el primer intento de descubrir a través de una autopsia algo vinculado con una capacidad especial. Otro ejemplo es el de Thomas Harvey, que cortó el cerebro de Einstein en 240 trozos que repartió entre otros tantos investigadores para descubrir el secreto de la genialidad."
Según Sevlever, la ciencia por ahora está lejos de poder explicar la genialidad, pero la posibilidad de almacenar los cerebros de personas que sufrieron enfermedades neurodegenerativas o psiquiátricas y ponerlos bajo el microscopio permite no sólo precisar el diagnóstico, sino también contestar las complejas preguntas que plantean esos procesos patológicos.

"Los bancos nos permiten estudiar decenas de cerebros, analizarlos en el nivel celular, genético y molecular, y correlacionar nuestras observaciones con manifestaciones clínicas", agrega.

Normales y patológicos
Desde que comenzó a funcionar, en 2006, el Banco de Cerebros ya recibió en calidad de donación altruista 33 cerebros. Estos pueden recibirse para su almacenamiento hasta 18 horas después de la muerte. Una mitad se congela en nitrógeno líquido a -80°C y la otra se guarda en formol. "En la primera, toda la biología queda congelada -explica Sevlever-: podemos estudiar qué genes se activaron, cómo se tradujeron en ARN [ácido ribonucleico, el mensajero que contiene la información genética procedente del ADN] y cómo ese ARN fabricó proteínas. Es lo que se llama genómica, transcriptómica y proteómica. Con la mitad no congelada, los patólogos podemos hacer el diagnóstico analizando los cambios microscópicos que presenta."

Para Sevlever, el banco es una oportunidad incomparable de estudiar fenómenos tan complejos que exceden una mirada reduccionista. "Sólo con un enfoque holístico uno puede comprenderlos, porque son mucho más que la suma de las partes -dice-. Para la biología de sistemas, hasta ahora fuimos un poco reduccionistas, detectamos hechos que tienen un gran impacto, pero nos perdimos otros más sutiles, aunque tal vez más importantes. Ahora, tratamos de analizar el cuadro en su totalidad." Además, agrega: "Todo el aparato teórico de la medicina se construyó sobre la base del estudio clínico-patológico que es la autopsia. La comprensión última de una enfermedad está en los tejidos".

Precisamente, el estudio post mórtem de muestras de cerebros de personas normales exhibió que hay pacientes que no tenían manifestaciones clínicas en los que sin embargo el análisis patológico se encontraba con las características placas de proteína beta amiloide típicas del mal de Alzheimer.

"Se calcula que entre el 10 y el 30% de los pacientes a los que se les atribuye enfermedad de Alzheimer en realidad padecen de otra patología", destaca Sevlever.
Desde su creación, los investigadores de Fleni realizaron estudios de la morfología de las neuronas implicadas en estos procesos patológicos y sobre los cambios metabólicos que presenta. Entre otros -explica el doctor Miguel Riudavets, coordinador del banco-, "los resultados más importantes de esos trabajos fueron la constatación de que aunque podría pensarse que los cambios más grandes [en el tejido cerebral] se dan cuando va avanzando el deterioro cognitivo en realidad ocurren cuando la persona es normal. Personas añosas que están bien cognitivamente ya presentan cambios histopatológicos. Para avanzar es fundamental contar con cerebros de personas sanas que nos permitan establecer comparaciones".

Según los científicos, se calcula que transcurren más de 20 años desde que comienza a desarrollarse el trastorno hasta que aparecen los primeros síntomas. Es entonces cuando podría abrirse una importantísima ventana terapéutica. "Hoy, la posibilidad de almacenar tejido biológico en buenas condiciones es una llave para empezar a entender algunas de estas enfermedades, ver qué pasa en la Argentina, colaborar con otros grupos y acceder a la biología de más alto nivel -dice Sevlever-. Y tal vez nos permita contestar una de las grandes preguntas de la neurociencia actual: ¿es el envejecimiento un proceso patológico o normal? ¿Todos tendremos enfermedad de Alzheimer o existe el envejecimiento exitoso?" Como se ve, esta historia continuará...
Nora Bär

2010/08/01

Hablar solo no es cosa de locos

Conversar con uno mismo tiene muchas ventajas, según afirman especialistas en salud mental. Es un desahogo y rebaja la tensión emocional. Poner palabras a los sentimientos, con público o sin él, ayuda a sacarlos de la cabeza.
Si a alguien le pillan hablando solo, lo más normal es que se invente una excusa. Por ejemplo, "estaba pensando en voz alta". Es raro que alguna persona reconozca que mantiene encendidos diálogos con el espejo del baño o que consigue resolver importantes cuestiones después de explicarse a sí mismo en voz alta una y otra vez el asunto en cuestión.
Socialmente no está aceptado hablar solo. Todavía se asocia con algunos trastornos mentales, como la esquizofrenia, patologías en las que los enfermos oyen voces en su cabeza y entablan hipotéticos diálogos con ellas.
Pero la gente sana que habla sola está muy cuerda. Al menos eso dice el psiquiatra Luis Rojas Marcos. En su último libro, Superar la adversidad. El poder de la resiliencia (Espasa Libros, 2010), apunta que "hablar con amigos, con una planta, con un gato o con uno mismo es uno de los factores que ayudan a superar una situación de crisis".
Hablar con uno mismo en voz alta también es útil para pensar mejor y tomar decisiones. "Para mucha gente es una forma de rebajar la intensidad emocional, un desahogo. ¿Están locos? No creo, las ventajas son enormes", comenta el psiquiatra. Equilibrio personal
En foros protegidos por el anonimato como son los grupos de fans que se crean en la red social Facebook, el grupo Hablar Solo consiguió 5999 seguidores en tiempo récord; el 70% eran mujeres.
"¿Es que los hombres no hablan solos?", se preguntaba su creador. La razón más frecuente que aducían los miembros del grupo para juntarse desbordaba sentido común: "Soy la única que me entiendo perfectamente a mí misma". La versión en inglés de este grupo, Just Because I Talk to Myself doesn´t Mean I Am Mad " (hablar solo no significa que esté loco), tenía una cantidad similar de seguidores con argumentos de la misma naturaleza.
Rojas Marcos afirma: "Es bueno antropomorfizar a los animales y a las plantas, los efectos son similares a comunicarte con un ser humano". Para el psiquiatra, la gran ventaja de hablar, solo o con público, es que "al poner palabras a los sentimientos, los sacas de tu cabeza, haces tu versión de los hechos y cuentas tu historia".
Este experto en estrés postraumático cree que es importante "teorizar" sobre lo que nos pasa. "Los sentimientos que no tienen palabras se acumulan en la memoria emocional. Por ejemplo, las imágenes y los olores de una situación de terror se quedan en la memoria emocional y sólo convirtiéndolas en palabras pasan a la memoria verbal. Lo más sano es pasar lo que se acumula de la memoria emocional a la verbal."
Hablar solo tampoco es un síntoma de soledad o de no tener amigos. Para mucha gente es una manera de organizar o aclarar las ideas. Cuanta más extravertida es la personalidad, los diálogos internos en voz alta son más frecuentes.
En opinión de la psicóloga Isabel Larraburu, las personas que exteriorizan mucho sus ideas y estados de ánimo necesitan mayor cantidad de estímulos sensoriales para conseguir el equilibrio personal.
"Si se ven forzados al aislamiento o la soledad, pueden llegar a construirse un ambiente a su medida hablando solos, con los animales o con las plantas." Todo lo contrario les pasa a los tímidos. "Un exceso de estímulos externos puede llegar a descompensarles. Están más a gusto con el silencio", explica la psicóloga.
La otra cara del diálogo sin fin con uno mismo es menos amable. "Es beneficioso hablar de cosas que han ocurrido en el presente, pero hablar compulsivamente y sin control de algo pasado no ayuda a pasar página", dice Rojas Marcos, que cuenta que a su consulta llegan pacientes con problemas de ansiedad cuyo origen está en un trauma de la infancia. Estos casos lo ponen en la disyuntiva de si es conveniente o no hablar del pasado para ayudar al paciente.
"Remover o no remover, ésa es la cuestión", ilustra el psiquiatra, y añade que hay que hablar del pasado sólo cuando es útil.
El psiquiatra Jesús de la Gándara también opina que no parar de hablar de algo pasado "aumenta la permanencia de los problemas en la conciencia, causa fatiga emocional e impide avanzar".
La cháchara compulsiva sobre un tema contribuye al fenómeno que los psiquiatras llaman mood amplification , es decir, la amplificación de los estados de ánimo negativos. Una de las terapias psicológicas más de moda en Occidente, el mindfulness , que consiste en eliminar la dispersión mental y concentrarse en disfrutar el presente, aboga por poner en práctica "el olvido voluntario".
Isabel Larraburu dice cómo hacerlo en su libro Atención plena (Temas de Hoy, 2009). Para conseguirlo conviene "dejar de recrear los malos recuerdos mediante conversaciones de modo que vayan cayendo en desuso, y no rememorar los detalles para que no se fijen en la memoria a largo plazo". Esta terapeuta opina que "hablar no es terapéutico, reivindico el silencio para utilizar las palabras de forma más sabia. Esto implica equivocarse menos, y no soltar la palabrería para esconder sentimientos u ocupar los momentos de incomodidad".
Sin embargo, la gente sigue con necesidad de contar su vida. "Probablemente se hable mucho, pero no lo suficiente de las cosas importantes", opina Rojas Marcos. Dice que: personas desconocidas le dejan testimonios "desgarradores", le piden opinión sobre "intimidades y cosas serias".
"Me sorprende que la gente tenga tanta necesidad de desahogo a través de un medio por el que sólo puedo dar consejos muy generales. Es como llamar al teléfono de la esperanza."
De niños o de adultos, todos tenemos soliloquios. Se estima que estas reflexiones en voz alta sin interlocutor suponen entre el 20 y el 60% de los comentarios que hacen los niños entre los cuatro y los diez años.
Cuando nos hacemos mayores, seguimos contándonos una receta mientras cocinamos, repetimos un número de teléfono para memorizarlo o nos animamos frente al espejo con esa conversación/discusión que tenemos que tener de una vez con el jefe.
Publicado en Diario El Paìs